ANIMALES
En la clasificación
científica de los seres vivos, el reino Animalia (animales) o Metazoo (metazoos)
constituye un amplio grupo de organismos
eucariotas, heterótrofos, pluricelulares y tisulares. Se caracterizan por su capacidad para la locomoción, por la ausencia
de clorofila y de pared en sus células, y por su desarrollo embrionario, que atraviesa una
fase de blástula y determina un plan
corporal fijo (aunque muchas especies pueden sufrir posteriormente metamorfosis). Los animales forman un grupo natural
estrechamente emparentado con los hongos. Animalia es uno
de los cuatro reinos del dominio Eucariota, y a él pertenece
el ser humano.
CARACTERÍSTICAS GENERALES
La movilidad es la característica
más llamativa de los organismos de este reino, pero no es exclusiva del grupo,
lo que da lugar a que sean designados a menudo como animales ciertos organismos
que pertenecen al reino Protista.
En el siguiente esquema se
muestran las características comunes a todos los animales:
·
Nutrición. Heterótrofa por
ingestión (a nivel celular, por fagocitosis y linfocitosis),
a diferencia de los hongos, también heterótrofos, pero que absorben los
nutrientes tras digerirlos externamente.
·
Reproducción. Todas las especies animales se reproducen sexualmente (algunas sólo por partenogénesis),
con gametos de
tamaño muy diferente (oogamia) y cigotos (ciclo diplómate). Algunas pueden, además, multiplicarse asexualmente. Son
típicamente diploides.
·
Desarrollo. Mediante embrión y hojas
embrionarias. El cigoto se divide repetidamente por mitosis hasta
originar una blástula.
·
Estructura y funciones. Poseen colágeno como proteína estructural. Tejidos celulares muy diferenciados. Sin pared celular.
Algunos con quitina. Fagocitosis, en formas basales. Ingestión con fagocitosis ulterior
o absorción en formas derivadas ("más evolucionadas"), con capacidad
de movimiento, etc.
·
Simetría. Excepto las esponjas,
los demás animales presentan una disposición regular de las estructuras del
cuerpo a lo largo de uno o más ejes corporales. Los tipos principales de
simetría son la radial y la bilateral.
Con pocas excepciones, la más
notable la de las esponjas (filo Porífera), los animales tienen tejidos diferenciados y especializados.
Estos incluyen músculos, que pueden contraerse para controlar el movimiento,
y un sistema nervioso, que envía y procesa señales.
Suele haber también una cámara digestiva interna, con una o dos aberturas. Los
animales con este tipo de organización son conocidos como eumetazoos,
en contraposición a los parazoos y meso zoos, que son niveles de
organización más simples ya que carecen de algunas de las características
mencionadas.
Todos los animales tienen células eucariontes,
rodeadas de una matriz extracelular característica
compuesta de colágeno y glicoproteínas elásticas.
Ésta puede calcificarse para
formar estructuras Como conchas, huesos y espículas.
Durante el desarrollo del animal se crea un armazón relativamente flexible por
el que las células se pueden mover y reorganizarse, haciendo posibles
estructuras más complejas. Esto contrasta con otros organismos pluricelulares como
las plantas y
los hongos,
que desarrollan un crecimiento progresivo ya que sus células permanecen en el
sitio mediante paredes celulares.
FUNCIONES
ESENCIALES
Los
animales llevan a cabo las siguientes funciones esenciales: alimentación,
respiración, circulación, excreción, respuesta, movimiento y reproducción:
ALIMENTACIÓN
La
mayoría de los animales no pueden absorber comida; la ingieren. Los animales
han evolucionado de diversas formas para alimentarse. Los herbívoros comen
plantas, los carnívoros comen otros animales; y los omnívoros se alimentan
tanto de plantas como de animales. Los detritívoros comen material vegetal y
animal en descomposición. Los comedores por filtración son animales acuáticos
que cuelan minúsculos organismos que flotan en el agua. Los animales también
forman relaciones simbióticas, en las que dos especies viven en estrecha
asociación mutua. Por ejemplo un parásito es un tipo de simbionte que vive
dentro o sobre otro organismo, el huésped. El parásito se alimenta del huésped
y lo daña.
RESPIRACIÓN
No
importa si viven en el agua o en la tierra, todos los animales respiran; esto
significa que pueden tomar oxígeno y despedir dióxido de carbono. Gracias a sus
cuerpos muy simples y de delgadas paredes, algunos animales utilizan la
difusión de estas sustancias a través de la piel. Sin embargo, la mayoría de los
animales han evolucionado complejos tejidos y sistemas orgánicos para la
respiración.
CIRCULACIÓN
Muchos
animales acuáticos pequeños, como algunos gusanos, utilizan solo la difusión
para transportar oxígeno y moléculas de nutrientes a todas sus células, y
recoger de ellas los productos de desecho. La difusión basta porque estos
animales apenas tienen un espesor de unas cuantas células. Sin embargo, los
animales más grandes poseen algún tipo de sistema circulatorio para desplazar
sustancias por el interior de sus cuerpos.
EXCRECIÓN
Un
producto de desecho primario de las células es el amoniaco, sustancia venenosa
que contiene nitrógeno. La acumulación de amoniaco y otros productos de desecho
podrían matar a un animal. La mayoría de los animales poseen un sistema
excretor que bien elimina amoniaco o bien
Lo
transforma en una sustancia menos tóxica que se elimina del cuerpo. Gracias a
que eliminan los desechos metabólicos, los sistemas excretores ayudan a
mantener la homeóstasis. Los sistemas excretores varían, desde células que
bombean agua fuera del cuerpo hasta órganos complejos como riñones.
Los
animales usan células especializadas, llamadas células nerviosas, para
responder a los sucesos de su medio ambiente. En la mayoría de los animales,
las células nerviosas están conectadas entre sí para formar un sistema
nervioso. Algunas células llamadas receptores, responden a sonidos, luz y otros
estímulos externos. Otras células nerviosas procesan información y determinan
la respuesta del animal. La organización de las células nerviosas dentro del
cuerpo cambia dramáticamente de un fílum.
Algunos
animales adultos permanecen fijos en un sitio. Aunque muchos tienen movilidad.
Sin embargo tanto los fijos como los más veloces normalmente poseen músculos o
tejidos musculares que se acortan para generar fuerza. La contracción muscular
permite que los animales movibles se desplacen, a menudo en combinación con una
estructura llamada esqueleto. Los músculos también ayudan a los animales, aún los
más sedentarios, a comer y bombear agua y otros líquidos fuera del cuerpo.
REPRODUCCIÓN
La
mayoría de los animales se reproducen sexualmente mediante la producción de
gametos haploides. La reproducción sexual ayuda a crear y mantener la
diversidad genética de una población. Por consiguiente, ayuda a mejorar la
capacidad de una especie para evolucionar con los cambios del medio ambiente.
Muchos invertebrados también pueden reproducirse asexualmente. La reproducción
asexual da origen a descendiente genéticamente idénticos a los progenitores.
Esta forma de reproducción permite que los animales aumenten rápidamente en
cantidad.
ORIGEN
Y DOCUMENTACIÓN FÓSIL
Mientras
que en las plantas se conocen varias series de formas que conducen de la
organización unicelular a la pluricelular, en el Reino Animal se sabe muy poco
sobre la transición entre protozoos y metazoos. Dicha transición no está
documentada por fósiles y las formas recientes supuestamente intermedias
tampoco nos ayudan demasiado.
En
este campo de la transición pueden mencionarse, por una parte, a
Proterospongia, coanoflagelado marino y planctónico que forma una masa
gelatinosa con coanocitos en la parte exterior y células ameboideas en el
interior, y por otra al pequeño organismo marino Trichoplax adhaerens (filo
placozoos) que forma una placa cerrada por epitelio pavimentados en la parte
dorsal y cilíndrico en la parte central, y presenta en la cavidad interior
células en forma de estrella; se reproduce por yemas flageladas y huevos. Otra
forma sencilla de metazoo es Xenoturbella, que vive sobre los fondos fangosos
del mar. Tienen algunos centímetros de largo y forma de hoja, una boca ventral
que conduce a un estómago en forma de saco. Entre la epidermis y el intestino
existe una capa de tejido conjuntivo con un tubo muscular longitudinal y
células musculares en el Mesénquima; en la parte basal de la epidermis existe
un plexo nervioso y en la parte anterior presenta un estatocisto; produce
óvulos y espermatozoides, éstos idénticos a los de diferentes metazoos
primitivos. Su posición sistemática es incierta, habiéndose propuesto como
miembro de un filo independiente (xenoturbélidos), a emplazar tal vez en la
base de los deuteróstomos. Por lo que respecta a los meso zoos, ya no son
considerados un estado de transición entre protistas y metazoos; su modo de
vida parásito parece que les condujo a una reducción y simplificación extremas
a partir de vermes a celomados.
Por
tanto, se debe recurrir a la morfología, fisiología y ontogenia comparadas de
los metazoos para poder reconstruir esta etapa de la evolución. Los datos
obtenidos con microscopía electrónica y análisis moleculares han apagado
antiguas controversias sobre el origen de los metazoos. En este sentido, parece
definitivamente rechazada la hipótesis sobre un origen polifilético; incluso
los placozoos y los meso zoos, considerados a veces como originados directa e
independientemente de los protistas, parecen a la luz de los nuevos datos
claramente metazoos. Tres son las principales teorías sobre el origen de los
metazoos.
TEORÍA
COLONIAL
La
teoría más aceptada es la que postula que los metazoos tuvieron un origen
colonial a partir de los coanoflagelados, un pequeño grupo de Mastigóforos
monoflagelados; algunos son individuales y otros coloniales. Dicha teoría se ve
avalada tanto por datos moleculares (ARN ribosómico) como morfológicos (las
mitocondrias y las raíces flagelares son muy semejantes en los metazoos y en
los coanoflagelados, un cierto número de metazoos presenta células tipo coanocito,
y los espermatozoides son uniflagelados en la mayor parte de ellos). Los
seguidores de esta teoría incluyen el filo Choanozoa en el reino animal, en
contraposición al resto de animales, los metazoos. El antecesor de los
metazoos, sería una colonia hueca y esférica de dichos flagelados; las células
sería uniflageladas en su superficie externa; la colonia poseería un eje
anteroposterior, nadando con el polo anterior hacia delante; entre las células
somáticas existirían algunas células reproductoras. Este estado hipotético se
ha denominado blastaea, y se cree que es el reflejo del estado de blástula que
se produce en el desarrollo de todos los animales. Por tanto, esta teoría
considera que los animales han evolucionado de protozoos flagelados. Sus parientes
vivos más cercanos son los coanoflagelados, flagelados con la misma estructura
que cierto tipo de células de las esponjas. Estudios moleculares los sitúan en
el supergrupo de los opistocontos, que también incluye a los hongos y a
pequeños protistas parasitarios emparentados con estos últimos. El nombre viene
de la localización trasera del flagelo en las células móviles, como en muchos
espermatozoides animales, mientras que otros eucariontes tienen flagelos
delanteros (acrocontos).